El 16 y 17 de septiembre se realizará la Cumbre Mundial de Solidaridad con Venezuela, país que se ha convertido en blanco de ataque de la derecha nacional e internacional, alentada por agentes imperiales de Estados Unidos.

Este sábado se realizó una reunión preparatoria liderada por el vicepresidente sectorial de Desarrollo Social y de la Revolución de las Misiones, Elías Jaua, con 23 activistas sociales de 17 naciones y representantes de 22 movimientos sociales, así como intelectuales nacionales.

En la instalación de este encuentro, efectuado en el salón Sucre de la Casa Amarilla (sede de la Cancillería), Jaua indicó que el pueblo de Venezuela libra hoy “una de sus más importantes batallas por preservar su independencia, su libertad y su autodeterminación, para construir una sociedad de iguales donde podamos vivir todos con justicia y con dignidad”.

Dio la bienvenida a los pueblos del mundo que ven en este país una luz de esperanza y que por ello se suman a este objetivo con el acompañamiento, la amistad y el compromiso.

Jaua recordó que la nación ha sufrido ataques y embestidas desmedidas desde el mismo surgimiento de la Revolución Bolivariana, con la cual el pueblo declaró su carácter antiimperialista para avanzar, en paz y con soberanía, hacia una sociedad más justa e inclusiva, expresada en la actualidad con la Asamblea Nacional Constituyente.

Ese proceso revolucionario, liderado por Hugo Chávez, trastocó los intereses imperiales, por lo que hoy han arreciado sus agresiones con amenazas bélicas y la emisión de una orden ejecutiva firmada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra el sistema económico y financiero de Venezuela, y que ocurre con la complacencia de la derecha nacional.

Ha sido “una larga batalla que ha librado el pueblo venezolano, especialmente en estos últimos 18 años, por defender su derecho a decidir su propio destino, por defender su derecho a la autodeterminación del modelo político, económico, social, cultural en el cual quiere vivir. Han sido 18 años de agresiones económicas, diplomáticas, internacionales, de agresiones militares, por la vía de la desestabilización, de la violencia”, dijo, y añadió que estos últimos años persiguen el objetivo de derrocar al mandatario nacional, Nicolás Maduro.

Jaua denunció que entre las opciones para conquistar esa meta, los ejes imperiales evalúan también el bloqueo naval para impedir cualquier acceso de bienes y medicamentos para los venezolanos y, a su vez, la comercialización de petróleo, principal fuente de divisas del país.

Ante ello, puntualizó que “nuestra victoria sobre la élite de supremacía es evitar que hagan la guerra contra nuestro pueblo”, mediante el fortalecimiento de la unidad interna y las alianzas con países hermanos, la preservación de la integridad nacional, la conquista de una paz irreversible basada en la dignidad, soberanía y en la autodeterminación, y el desmontaje de la hegemonía imperial norteamericano.

“No se trata de aislarnos sino de comenzar definitivamente a andar sobre nuestros propios pies y construir relaciones de equidad y de equilibrio” con otras naciones, recalcó.