El Gobierno Nacional apuesta siempre por el camino del diálogo, la paz y la integración, ya que pese a los sucesos promovidos por el imperialismo en la región como el magnicidio en Haití y los intentos de desestabilización en Cuba, la partida del tablero geopolítico la está ganando los pueblos.
Tal aseveración la hizo el canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Jorge Arreaza, durante una entrevista en el programa “América Latina en disputa”, transmitido por la multiestatal Telesur, quien especificó que la apuesta real de Venezuela es por los sectores populares, para que encuentren vías que permitan seguir construyendo democracia.
En una reseña de la entrevista publicada en la web de la cancillería, Arreaza alertó que los habitantes “son los que están en la ofensiva y van a ir reconquistando y conquistando nuevos espacios, no tenemos la menor duda. Hay que tener paciencia estratégica, estar muy alertas, porque eso que ocurrió en Haití puede suceder en cualquiera de nuestros países, no solo contra presidentes sino contra líderes de la izquierda”.
Al reiterar que en Venezuela sólo creen en la paz y en la unión de los pueblos, el Ministro para Relaciones Exteriores indicó que la mayor evidencia de esa meta es que el próximo 24 de julio, en homenaje al natalicio del Libertador Simón Bolívar, se realizará en México una reunión de ministros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y el 18 de septiembre, en ocasión del bicentenario de la independencia de México, este país acogerá una reunión de jefes de Gobierno y de Estado también de la CELAC.
Pronosticó que “de aquí a 2030 se verán muchos cambios en el mundo y en América Latina se superarán los espacios obtenidos en la primera década de este siglo, con la conquista de otros nuevos y será un proceso definitivo”.
El canciller Arreaza contextualizó que la situación que ocurre en la región se trata de una disputa histórica de 200 años por un territorio, unos recursos naturales, una posición geográfica en el mundo y que la arremetida imperial de los últimos años responde a la reversión del golpe de Estado en Bolivia, la resistencia de Venezuela, la transición generacional sana, pacífica que hubo en Cuba de cambio de jefe de Estado.
“Ese péndulo que se venía moviendo este siglo entre la izquierda y la derecha, inevitablemente se quedará en la izquierda, porque es la característica de los pueblos”, aseveró.
El jefe de la diplomacia venezolana explicó que el imperialismo va mucho más allá de la Casa Blanca y el complejo militar-industrial de Estados Unidos; se trata de un entramado de corporaciones militares, financieras, bélicas, tecnológicas que no respetan nacionalidad y tienen representación en algunos gobiernos; el más importante, el de Estados Unidos y en Colombia en América del Sur.
En este sentido, señaló que Colombia es vista como el Israel de América Latina desde hace décadas. “Lamentablemente, es un dolor, una herida, sobre todo para los pueblos bolivarianos que Colombia sea tomada como el enclave, la plataforma principal del imperialismo. Ahí se preparó la operación Gedeón y todas las demás contra Venezuela”.
Al referirse a la incursión paramilitar que recientemente azotó un barrio de Caracas, el Ministro explicó que este plan fue financiado con armamento, municiones, con un corredor que identifica un origen en Colombia, con vinculación del narcotráfico; sin embargo, “nuestra inteligencia logró infiltrarse y en cuestión de horas pudimos retomar el control con la menor cantidad de bajas”.
En el desarrollo de la entrevista, el Canciller además confirmó que el político opositor venezolano Emilio Graterón está refugiado en la Embajada de Chile en el país.