Entre los días 20 y 21 de junio, en Tiquipaya, Cochabamba, se llevará a cabo la Conferencia Mundial de los Pueblos para debatir la construcción de una ciudadanía universal con miras a un mundo sin “muros”.
El presidente Evo Morales, informó, en una breve conferencia de prensa celebrada en marzo junto con los miembros de la Coordinadora Nacional por el Cambio (Conalcam), que esa iniciativa fue recibida con agrado por los presidentes de los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), con quienes se reunió en privado en Caracas, Venezuela.
Para Morales, tras la posesión de Donald Trump como nuevo presidente de Estados Unidos se reavivó la política de persecución a los migrantes y el plan de construir un muro en la frontera con México. En ese sentido, Morales señaló que no es posible que haya muros y murallas para migrantes, latinos y refugiados y no para las intervenciones militares que lo único que hacen es saquear los recursos naturales de los pueblos.
“Por eso, inspirado en la lucha de los movimientos sociales de modo conjunto Gobierno y pueblo, hay que hacer un profundo debate mundial con relación a la migración en estos tiempos”, mencionó.
La organización de la conferencia mundial estará a cargo de la Cancillería boliviana en coordinación con los movimientos sociales. De acuerdo con la convocatoria participarán del evento delegados de todos los países del mundo, así como también personalidades defensoras de migrantes, juristas y representantes de gobiernos progresistas.
Por su parte el viceministro boliviano Alfredo Rada, en declaraciones ofrecidas este domingo al Pueblo es Noticia de Bolivia TV, adelantó que el encuentro se pronunciará sobre las tendencias xenófobas, discriminatorios y racistas, capaces de poner en peligro la convivencia entre los países y los pueblos. Además, enviará un mensaje de paz desde Latinoamérica, una región sin guerras ni conflictos armados, a responsables de migraciones masivas y disputas entre las naciones con inclinaciones a generalizarse.
Rada detalló que el encuentro contará con más de mil participantes procedentes de 41 países y abarcará tres ejes fundamentales: La ciudadanía universal, entendida como el derecho de las personas de ir de un país a otro, la soberanía de los Estados y la identidad de los pueblos.
De la Cumbre se redactará un decálogo y una declaración de los pueblos sobre el respeto de los derechos de los migrantes, que serán presentados en todos los foros mundiales y regionales para reclamar un planeta sin muros y con la intención de ser incluidos en los documentos oficiales de las Naciones Unidas.
El viceministro anunció que la cita arrancará con una salutación especial en video del papa Francisco, quien enviará un delegado especial, experto en la temática de migración. Entre los asistentes confirmados destacó a los exmandatarios de Ecuador y Paraguay, Rafael Correa y Fernando Lugo, respectivamente; la exsenadora colombiana Piedad Córdoba y el expresidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero.
La Conferencia Mundial de Pueblos abordará temas migratorios desde distintas aristas, para emitir una declaratoria que determine el camino frente a ese problema, alternativas de solución y la convivencia entre países en paz y hermandad. Asimismo, analizará el derecho a la ciudadanía universal, el impacto del cambio climático, la crisis económica, las guerras, las políticas intervencionistas sobre los flujos migratorios y la contribución de los migrantes al desarrollo humano integral e incluyente de los pueblos. A ello se suma el estudio de las estrategias conjuntas para la observancia, protección y ampliación de los derechos de los migrantes, refugiados y sus familias.
De manera particular, Rada recordó que cerca de 1,2 millones de bolivianos se encuentran fuera del país, por lo que la realización del evento cobra mayor importancia para exigir al mundo que se respeten los derechos del migrante, pero también de los refugiados.También anticipó que en el acto de inauguración participará la reconocida cantante paraguaya María Ríos, quien está comprometida con las causas de los derechos de los pueblos.