Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el Gobierno colombiano firman este jueves el esperado acuerdo del cese al fuego bilateral y definitivo, un paso decisivo para poner fin a un conflicto interno de más de 50 años.
El acuerdo del cese al fuego no es el último paso del proceso paz colombiano, pero es el más importante porque las FARC-EP se comprometen a dejar las armas y convertirse en movimiento político.
El garante de Cuba, Rodolfo Benítez, leyó el comunicado conjunto número 76, en el que se acordó el cese al fuego biltateral y definitivo y la dejación de las armas; las garantías de seguridad para las FARC-EP y la lucha contra las organizaciones criminales, incluyendo los grupos paramilitares; y la refrendación de los acuerdos.
Medios locales señalaron que el acuerdo del cese al fuego se implementará cuando se firme el acuerdo definitivo de paz que según estimaciones de los negociadores podría darse en los próximos meses.
En el hecho histórico participan el mandatario colombiano Juan Manuel Santos y el comandante de las FARC-EP, Timoleón Jiménez. También están presentes el presidente de Cuba, Raúl Castro y representantes de los países garantes.
Como "países acompañantes" están la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y el jefe de Estado venezolano, Nicolás Maduro. El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, diplomáticos de EE.UU. y la Unión Europea también presencian el evento.
DATO: Durante las negociaciones en La Habana, las FARC-EP decretaron más de seis veces el cese al fuego unilateral (anteriormente lo hicieron en épocas de elecciones y fiestas decembrinas) tratando de buscar la misma acción por parte del Gobierno y el desescalamiento del conflicto, sin embargo, el mandatario Juan Manuel Santos se mostró renuente a este llamado.
Las cifras de la guerra
En 2012, el Centro Nacional de Memoria Histórica publicó un informe titulado ¡Basta ya! Colombia: memorias de guerra y dignidad, en el que reflejaban el alcance y daño social que ha ocasionado el conflicto colombiano, el más duradero del mundo moderno.
Desde 1958 hasta 2012 la guerra en Colombia ha arrojado 218 mil fallecidos y 25 mil desaparecidos de manera forzosa; mientras que en asesinatos selectivos se cuentan unos 173 mil colombianos, la mayoría de ellos a manos de grupos paramilitares de la extrema derecha.
Estas bandas también ocupan el primer lugar en cuanto a masacres perpetradas con mil 156 víctimas. Otro drama que refleja este organismo público es de los desplazamientos violentos, que desde 1985 hasta la fecha de publicación del informe superaban los 10 millones de colombianos.
En contexto
Las FARC-EP y el Gobierno colombiano dialogan en La Habana (capital cubana) para lograr una salida pacífica al conflicto armado que vive la nación suramericana desde hace más de 50 años.
Los diálogos comenzaron en 2012 y hasta ahora han logrado avances en temas como reforma rural integral, participación política y drogas ilícitas. Con este nuevo acuerdo quedan pocos puntos para poner fin a la guerra.