Del 29 de abril al 3 de mayo de 2016, la Articulación de Movimientos hacia el ALBA realizará su Encuentro continental, con participación de delegaciones de sur a norte del continente. Compartimos la nota editorial elaborada por el frente de formación.
Desde el principio del proceso que generó a la Articulación Continental de los Movimientos Sociales hacia el ALBA, se ha elegido la “formación política” como un pilar fundamental y prioritario para el avance de una integración popular en Nuestra América. En nuestra I Asamblea Continental, en Mayo de 2013, acordamos la realización de un Encuentro de Escuelas de Formación Política del Continente, y desde entonces hemos impulsado, a través del Frente de Formación Política de la Secretaría Operativa, la formación de un equipo de trabajo que viene caminando en la construcción del Sistema Continental de Formación Política de Alba Movimientos.
En ese camino se realizará el ENCUENTRO CONTINENTAL DE EXPERIENCIAS DE FORMACIÓN POLÍTICA “BERTA CÁCERES”, en Lima, del 29 de Abril a 03 de Mayo de 2016, en homenaje a esta luchadora hondureña asesinada por su labor en la defensa de los pueblos indígenas lencas y de su territorio, en defensa de la naturaleza y en contra del Imperialismo en su país y en toda América Latina.
En el camino de construir el Frente de Formación Política, lanzamos este boletín con el objetivo de generar una mayor articulación entre las experiencias que se vienen desarrollando, intercambiar materiales, y generar un espacio de debate y difusión de los temas que creemos fortalecen la acción revolucionaria.
La formación debe ser alentada permanentemente a ser realizada en todos y cada uno de los espacios donde se desarrolla la militancia. Es allí donde la formación crítica es una herramienta eficaz para combatir dos problemas que siempre están presentes o al menos potencialmente en el seno de las organizaciones: el burocratismo y la centralización jerárquica entre los militantes, o mejor dicho la escisión entre dirigentes y dirigidos. Algo común en la sociedad burguesa que nos atraviesa también a nosotrxs, lxs que aspiramos a ser revolucionarixs y que reproducimos, cuando no se problematizan o visualizan tales vicios.
La formación crítica es elemento esencial para construirnos como sujetos conscientes y capaces de iniciativa creadora junto a la auto -actividad de las masas (no el automatismo) en el proceso de construcción del Poder Popular. Formar con sentido revolucionario no es repartir tareas solamente sino animarnos a pensar como dirigentes, como clase dirigente moral e intelectualmente superior a la clase burguesa dominante. Formar y formarnos, es desafiarnos a romper con los obstáculos de nuestra conciencia permeada por los típicos procesos contemporáneos alienantes que afrontamos. Es un intento por romper con el conservadurismo impuesto por el pensamiento burgués que sigue sosteniendo- a costa de sacrificar el futuro de la especie humana misma- la explotación del hombre por el hombre, la propiedad privada, el Estado y la familia monogámica.
A la luz de nuestros días hay señales de que Nuestra América es un territorio de rebeldías, de resistencias al capital y al patriarcado, al extractivismo depredador de la naturaleza en manos de las corporaciones mineras y del agronegocio, a la amenaza constante del imperialismo. Para eso sirve el internacionalismo, para nutrirnos a través del compartir luchas, esperanzas y sufrimientos, la solidaridad de clase expresada en hechos concretos de cooperación y reciprocidad.
“Si no existe la organización, las ideas, después del primer impulso, van perdiendo eficacia, van cayendo en la rutina, van cayendo en el conformismo y acaban por ser simplemente un recuerdo”