Los presidentes de Bolivia, Evo Morales; Colombia, Juan Manuel Santos; Chile, Michelle Bachelet; y Perú, Ollanta Humala, intervienen en la jornada final de un foro sobre el problema mundial de las drogas.
Se espera que los mandatarios latinoamericanos llamen en la Asamblea General de la ONU a renovar las estrategias antinarcóticos, a partir de un enfoque integral que incluya una mayor cooperación internacional y respeto para el principio de la responsabilidad compartida en la lucha contra el flagelo.
Durante las jornadas previas del foro instalado el martes, representantes de la región y de otras partes del planeta abogaron por centrar el abordaje al fenómeno en los seres humanos, privilegiando la prevención y el apoyo a las personas dependientes, con atención de salud y reinserción social.
La víspera, la ministra de Justicia de Cuba, María Esther Reus, reclamó voluntad política para lidiar con el problema de las drogas ilícitas, las cuales consideró un obstáculo para el desarrollo sostenible.
Reus advirtió en el encuentro que reúne a presidentes, ministros, expertos y representantes de la sociedad civil de los cinco continentes, que la solución del asunto de la producción y tráfico masivos de narcóticos desde el Sur pasa, en buena medida, por eliminar la demanda mayoritaria del Norte.
Por su parte, el jefe de Estado mexicano, Enrique Peña Nieto, propuso el martes 10 puntos para actualizar las políticas contra los estupefacientes, con prioridad para la cooperación, la salud y la prevención.
Además de los líderes latinoamericanos, en el último día de la sesión especial convocada por la Asamblea General intervendrán alrededor de 35 oradores, entre ellos los representantes de Argelia, Ecuador, El Salvador, Finlandia, Jordania, Libia, Myanmar, Nicaragua, Rusia, Sudán y Venezuela.