La Central de Trabajadores de Argentina, Autónoma, convocó a un paro nacional y movilizaciones el martes contra los despidos y el ajuste económico del gobierno del presidente Mauricio Macri.

Desde la CTA Autónoma confirmaron que de Ushuaia, la ciudad más meridional, hasta La Quiaca, en el norte, habrá paros y movilizaciones, en tanto en la Capital los afiliados a los diversos gremios de esa central sindical marcharán hacia el Congreso.

En la provincia de Buenos Aires, los trabajadores estatales, profesionales de la salud, docentes y judiciales pararán sus labores durante 48 horas y se movilizarán a la sede del Gobierno Provincial para confluir luego en el Congreso Nacional junto al resto de las organizaciones, según un comunicado.

El jueves 31 vence el plazo que fijó el Gobierno para la revisión de los contratos de empleados del Estado. Los gremios estiman que unos 25 mil trabajadores corren riesgo de quedar en la calle.

La Asociación de Trabajadores del Estado, en la Capital, hará un paro ese día.

"El macrismo sigue avanzando con violencia contra los trabajadores del Estado y por eso es la necesidad de otra huelga; no descartamos que el conflicto se agudice y llamar a un nuevo paro después del 31", aseveró Daniel Catalano, titular de ATE Capital.

Durante los últimos días hubo 240 despidos en la Biblioteca Nacional y cifra parecida en la Dirección Nacional de Educación, mientras en el Complejo Nuclear de Atucha se prevé que dos mil 400 técnicos y administrativos quedarán en la calle.

El diario La Nación informó que el Gobierno despedirá antes de que termine el mes mil 500 empleados públicos a quienes se les extendió por tres meses su labor para evaluar su desempeño.

En un comunicado, la CTA Autónoma adelantó que el martes será una jornada de lucha "por el cese de los despidos en las dependencias del Estado nacional, provincial y municipal así como en el sector privado, frenar el ajuste, los tarifazos".

En febrero la administración Macri eliminó los subsidios a la electricidad, lo que significó un aumento en las tarifas de 500 por ciento, como promedio, y ya anunció un incremento en el costo del gas y se viene otra alza eléctrica.

Consultoras independientes y centros de análisis de asociaciones sindicales calculan que la inflación oscila de 35 a 40 por ciento.

Los gremios de la CTA Autónoma demandarán que "se derogue el impuesto al salario, que las negociaciones laborales sean libres y sin techo, aumento de salarios, jubilaciones y planes sociales así como que se termine con la criminalización de la protesta social y se derogue la Ley Antiterrorista y el protocolo antipiquetes".

La conflictividad laboral aumenta en Argentina, sin embargo las centrales gremiales no logran conciliar discrepancias internas y paran o se movilizan de forma separada, sin que exista un posicionamiento común de unidad en el reclamo.