El Canciller ecuatoriano inauguró la IX Reunión de Ministros de Relaciones Exteriores de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en la que se trabajará el proyecto de agenda de la IV Cumbre de Jefes de Estado que se realizará este miércoles en la sede de Unasur.
Durante esta jornada de trabajo también se discutirá varios documentos para ponerlos a consideración de los Mandatarios del bloque regional como son: la Declaración Política, el Plan de Acción de la Celac 2016 y algunas importantes Declaraciones Especiales.
“La Celac está llamada a jugar un papel fundamental en el cambio de época que vivimos y deberá ser el espacio donde los latinoamericanos y caribeños tratemos los asuntos de la región en forma soberana y como hermanos”, manifestó el Canciller Patiño al inaugurar.
Exhortó para que la labor de esta jornada sea fructífera, “trabajo que demanda de todos y cada uno de nosotros el mayor compromiso con la Patria Grande, con Latinoamérica y el Caribe integrados en una sola, eterna e indisoluble fraternidad”, dijo.
En el 2015, Ecuador ocupó la Presidencia Pro Témpore de CELAC, en la que ha propuesto un proyecto denominado Agenda 2020 que establece la reducción de la pobreza y desigualdad; la educación, ciencia y tecnología; el cambio climático; la infraestructura y conectividad; y el financiamiento para el desarrollo.
En ese sentido, el Canciller Patiño destacó que el principal elemento de esta propuesta es la “erradicación de la pobreza extrema, reto de importancia substantiva para la sociedad global, pues constituye un imperativo moral, un reclamo de la conciencia planetaria que lo tenemos que alcanzar en nuestra región”.
Además indicó que según datos de la CEPAL, en la región latinoamericana y caribeña viven cerca de 165 millones de personas en situación de pobreza, de las cuales 69 son personas en situación de extrema pobreza, “pese a ello la región es una de las más avanzadas en el cumplimiento de los Objetivos del Desarrollo del Milenio”, manifestó.
“Podemos considerar como viables las metas propuestas en la agenda regional, sin embargo, debemos reconocer que reducir la desigualdad es un desafío completo que requiere acciones en los sistemas laborales, sistema tributario, así como en el destino del gasto público, lo que demanda de nosotros un trabajo continuado hasta lograr que en la región se reduzcan las brechas de desigualdad e inequidad”, enfatizó el Canciller Patiño.
“La Agenda 2020, (herramienta regional) de combate a la pobreza extrema, no debe ser entendida sólo como un conjunto de metas que nos imponemos y peor como una competencia entre nuestras naciones, ni como la tarea obligada que cada Estado toma en solitario. Más bien debe ser asumida como un compromiso de hermanos, como una decisión colectiva, en la cual una nación apoya y se apoya en las otras para conseguir las metas que todo pueblo aspira alcanzar, esto es el fin de la pobreza y la vigencia de la equidad”, afirmó.
Por otro lado, el Ministro Ricardo Patiño mencionó que aún hay mucho por hacer para acelerar la reducción global de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero cuya responsabilidad mayor recae en los países desarrollados, “pero estos efectos perturban directamente al desarrollo sostenible y a la población más pobre y necesitada del planeta, a la vez es una amenaza a la biodiversidad, los recursos naturales, la seguridad alimentaria, y la supervivencia del ser humano”, concluyó.
De igual manera, enfatizó que en la Cop 21 de diciembre 2015, América Latina y el Caribe establecieron prioridades y posicionaron los elementos comunes de los países miembros de la Celac que recogen aspectos básicos para la defensa del medio ambiente, como “el continuar fortaleciendo la posición común en la lucha contra los efectos del cambio climático, partiendo de las responsabilidades compartidas pero diferenciadas, son muestras de los pasos firmes que nos avocan como región”, aseveró.
También se refirió a que en la región se cree “nuestra propia Arquitectura Financiera Regional, para que nuestro ahorro se quede en la región, para que nuestro ahorro financie nuestros proyectos de desarrollo y no vaya a financiar a los países más desarrollados”.