Movimientos populares, pastorales y partidos políticos que integran el Frente Brasil Popular en esta urbe realizaron un llamado a la unidad para rechazar los intentos de juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff.
Los sectores golpistas de derecha, a través de un grupo de parlamentarios, liderados por el diputado Eduardo Cunha, quieren enjuiciar a Rousseff con miras a apartarla del poder, acabar con los programas sociales, privatizar el país y subordinarlo a los intereses imperialista, destaca un manifiesto de este Frente.
Llamamos por ello a todos las fuerzas progresistas a convencer a los indecisos y participar en la jornada nacional contra el juicio político del 16 próximo, indica el documento.
Estamos contra este proceso de destitución de la presidenta porque no cometió delito alguno, ni ilegalidad que puede considerarse un crimen de responsabilidad fiscal, señala el pronunciamiento.
Según el Frente, detrás de esta propuesta figura Cunha, líder de la Cámara de Diputados, dueño de cuentas bancarias en Suiza, donde tiene depositados varios millones de origen ilícito.
Cunha pretende llevar adelante este proceso contra la gobernante para contentar a la derecha e impedir asimismo la pérdida de su mandato en el órgano legislativo, revela el texto, el cual insiste en que no existen evidencias claras que sustenten alguna violación de parte de la presidenta.
Si los sectores conservadores desean el poder, deben esperar hasta los próximos comicios, en 2018, y garantizar la consolidación de la democracia, la cual está en peligro con estos intentos desatinados, refleja el manifiesto.
Además de estas agrupaciones, un grupo de 70 juristas, de los cuales 30 se reunieron ayer con Rousseff, anunciaron su rechazo a cualquier tentativa parlamentaria de enjuiciar a la dignataria, así como 26 de los 27 gobernadores del país censuraron esta decisión de la autoridad parlamentaria, que tiene como objetivo hacer abortar el proceso democrático brasileño.
Con anterioridad, dirigentes de formaciones de izquierda instituyeron un movimiento en defensa de la democracia y contra la implementación de un golpe de Estado contra la mandataria a través de un juicio político.