El Presidente de la República, Nicolás Maduro, manifestó este domingo que sólo la solidaridad permitirá a los pueblos de Suramérica y el Caribe sellar el proceso de integración labrado por los libertadores y que cobró mayor fuerza con el cambio de época que surgió en la región tras el triunfo de líderes populares.
Desde el Cuartel de la Montaña, ubicado en la parroquia 23 de Enero de Caracas, donde se llevó a cabo un acto en honor al líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, Maduro destacó que un signo vital de la integración que se ha levantado en Suramérica y el Caribe es la solidaridad.
Por ello llamó a mantener esos lazos de cooperación, de unidad, de solidaridad y complementariedad, única vía para lograr concretar el sueño de independencia de los libertadores.
"Hermanos de la Celac (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), de la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas), de Petrocaribe, sólo unidos con un nuevo modelo de solidaridad, de cooperación, de complementariedad, sobre nuevos y profundos valores de amor, podremos construir durante lo que resta del siglo XXI una nueva América Latina, un nuevo Caribe", expresó el Mandatario, en transmisión de Venezolana de Televisión.
"La máxima expresión del ser humano es la expresión del amor y la solidaridad. Sólo cuando se une el amor y la solidaridad surgen los grandes eventos humanos, desde el punto de vista social, histórico, individual y todo este proyecto que se ha levantado en América Latina y el Caribe en este siglo XXI tiene como signo, como marcador vital el amor y la solidaridad", manifestó, acompañado del vicepresidente de la República, Jorge Arreaza, del primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves, de la hija mayor del comandante Chávez, Rosa Virginia, y de 14 ciudadanos vicentinos que se operaron en Venezuela con la Misión Milagro.
Señaló que "solo con la escuela de la solidaridad y del amor podremos construir una nueva humanidad desde adentro de los países. Con amor y solidaridad podremos construir una región verdaderamente de paz".
Al respecto, agregó: "Será el culto al amor, a los libertadores, a los gigantes, el culto a la solidaridad y a su práctica diaria, lo que nos llevará a ser grandes. Estamos convencidos de eso".
Maduro comentó que una de las expresiones de solidaridad más grandes que se viven en Latinoamérica y el Caribe es la Misión Milagro, creada por los comandantes Hugo Chávez y Fidel Castro en 2005 para devolver la visión a millones de personas de América, el Caribe e incluso del África que viven en situación de pobreza y no pueden costear operaciones oftalmológicas que les permitan ver a plenitud.
Luego de 10 años, más de 4 millones de personas de toda la región, incluida África, han recuperado la vista.
Expansión de la Misión Milagro
A fin de expandir la Misión Milagro por todo el bloque regional, Maduro informó que le solicitará a su par colombiano, Juan Manuel Santos, trabajar juntos para permitir que más estudiantes, campesinos y trabajadores del país andino se sumen a este programa.
Al revisar los datos de la Misión Milagro en estos 10 años, Maduro indicó que de 4 millones de personas operadas, en Colombia sólo han sido atendidas 7.700, cifra que puede ampliarse a un millón porque existe la capacidad técnica y de especialistas para lograrlo, señaló.
"Extender esta Misión en todo el territorio colombiano nos ayudará a seguir trabajando en pro de la paz con este país y neutralizar los intentos que hacen ciertos sectores para que Colombia y Venezuela peleen, entonces vamos a proponerle esto al presidente Santos", enfatizó.
Maduro llamó a impulsar la Misión Milagro en toda América para cumplir la meta de seis millones de personas operadas que se plantearon Chávez y Fidel al crear este programa social de integración.
En este sentido, ratificó su propuesta al Papa Francisco de expandir la Misión Milagro en países del mundo, con el apoyo del Vaticano, la Iglesia Católica y el Alba.
"Podremos expandir la Misión Milagro, no sólo para mejorar la vista de las personas sino también para mejorar la salud de los pueblos del mundo. Esa es una causa noble, cristiana y justa", dijo.
"No existe en la tierra un proyecto que haya atendido a 4 millones de personas en el mundo, que les haya devuelto la visión", agregó.
En este sentido, llamó a seguir esta senda que permitirá concretar la unión e independencia.
Por ello enfatizó que es tiempo de que los pueblos de América Latina y el Caribe construyan su propio rumbo con formas de integración distintas a instituciones como la Organización de Estados Americanos (OEA), proclive a los intereses imperiales de Estados Unidos.
"Es tiempo de otras organizaciones, de otro rumbo, de cambio, de otra vida (...) La Asamblea General de la OEA se convierte siempre en una guarida de conspiración contra los procesos progresistas, nobles, revolucionarios, auténticamente populares del continente", rechazó.
En contraposición, el presidente Maduro señaló que el Alba "ha llevado vida, ha enseñado a leer y a escribir a más de seis millones de latinoamericanos, ha curado de la vista a más de cuatro millones de latinoamericanos, ha apoyado e impulsado la democracia, ¿y la OEA para qué ha servido?".
Se preguntó: "¿cuántos pacientes ha curado la OEA en 67 años? y preguntaría ¿cuántos muertos tiene la OEA en 67 años? ¿cuántos golpes de Estado? ¿cuántas conspiraciones?".
Maduro señaló que "es tiempo de la construcción de nuestra propia vida, de nuestro propio camino, de Celac, de Unasur, del Alba, del amor, de la solidaridad, de la Misión Milagro".
"¿Ustedes creen que nuestro destino debe ser lo que sucede en África donde miles de hombres huyen de la miseria, la necesidad, la orfandad y son rechazados en Europa? ¿Creen que ese puede ser el destino de la humanidad? No, el destino de la humanidad debe ser la práctica de la solidaridad como marca indeclinable de una nueva ideología profundamente humana", reflexionó.