El Gobierno de Chile debería escuchar las voces que en todo el mundo, incluyendo en su propio territorio, que piden dar una solución pacífica al injusto enclaustramiento marítimo del que Bolivia es víctima desde hace 136 años.
La reflexión fue realizada ayer por el presidente Evo Morales durante una entrevista concedida a medios estatales en la que se refirió a la demanda marítima y la defensa de los alegatos bolivianos para sustentar que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya es el organismo competente para tratar este impasse con Chile.
“¿Cómo es posible que los gobiernos chilenos no puedan escuchar, no solamente a los organismos internacionales, personalidades y también a su pueblo? Porque el tema del mar no es una simple salida para Bolivia, es una cuestión de integración de Sudamérica, de Latinoamérica”, manifestó Morales.
Durante los 136 años que Bolivia se encuentra privada de un acceso soberano al mar, ha recibido un amplio y constante apoyo por parte de diferentes autoridades, organismos multilaterales, personalidades y movimientos sociales, quienes le manifestaron su respaldo para que junto con Chile encuentre una solución definitiva al problema marítimo boliviano.
En el libro “¡…Yo quiero un mar, un mar azul para Bolivia!” se recopilan algunos ejemplos de este respaldo como por ejemplo los ex presidentes de Estados Unidos como Harry Truman, Jimmy Carter, Ronald Reagan y Bill Clinton.
Se suman otros importantes personajes como el Papa Juan Pablo II; el Secretario General de las Naciones Unidas Koffi Annan; los escritores Mario Vargas Llosa y Eduardo Galeano; los premios Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel y Rigoberta Menchú; además de personalidades chilenas como los historiadores Gonzalo Vial Correa y Cástulo Martínez, el alcalde de Iquique Jorge Soria, entre muchas otras.
Además existe el apoyo internacional por parte de organizaciones sociales en distintos lugares del planeta; incluso en Chile. En las distintas ocasiones que Morales llegó al vecino país, multitudes de trabajadores, políticos, literarios e intelectuales corearon una y otra vez “Mar para Bolivia, Mar para Bolivia”.
“A mí me sorprende cuando vamos a actos oficiales, si hay reuniones con Presidentes, siempre me invitan estudiantes, los movimientos sociales, yo me escapo un rato y ya están gritando Mar para Bolivia en Uruguay, en Argentina, hasta en Chile, en Panamá”, relató el Primer Mandatario.
Acotó que “Prácticamente hay un profundo sentimiento del mundo para que esto se resuelva mediante el diálogo y una cuestión pacífica”.
En 2013 Bolivia instauró una demanda contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para recuperar su cualidad marítima.
Chile invadió suelo boliviano en febrero de 1879 y desató una contienda bélica que terminó cercenando 400 kilómetros de playa y 120.000 kilómetros de territorio.
Desde entonces, Bolivia reivindica en diferentes foros internacionales el derecho de recuperar su cualidad marítima y tras presentar una demanda ante la Corte de La Haya, en 2013, el respaldo que recibió fue creciendo en forma creciente.
Bolivia reitera que el diálogo con Chile sigue abierto
Pese a la demanda presentada en la CIJ, el presidente Evo Morales recordó que el pueblo boliviano sigue abierto al diálogo con el hermano país, al rememorar las ocasiones en las que hubo acercamientos con la actual presidenta chilena Michelle Bachelet entre 2006 y 2010.
“El diálogo está abierto, si hay una propuesta oficial de soluciones para que Bolivia vuelva al Pacífico con soberanía, cumpliendo sus ofrecimientos de antes y de hoy, antes del Tratado de 1904, después del Tratado de 1904; antes del Pacto de Bogotá, después del Pacto de Bogotá”, señaló Morales durante la conferencia de prensa.
“Están todas las documentaciones de distintas autoridades, somos del diálogo, venimos de la cultura del diálogo, las intervenciones siempre deben ser mediante diálogo y no como algunos dicen que con las armas les ha ido mejor que con la diplomacia”, acotó el Primer Mandatario.
Al menos en 20 ocasiones las autoridades chilenas (ministros, embajadores, incluso presidentes) abrieron un escenario de diálogo con sus similares bolivianos, en el que incluyeron el acceso de Bolivia al océano Pacífico.
Éstos, a los que se conoce como actos unilaterales, son la base jurídica de la demanda que Bolivia presentó contra Chile en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, en 2013, son enumerados en El Libro del Mar.
El texto, elaborado por el delegado para la Causa Marítima, el expresidente Carlos Mesa (2003-2005), y el equipo de la Dirección Estratégica de Reivindicación Marítima (Diremar), hace el desglose de cada uno de estos escenarios en el capítulo “Los compromisos de Chile para negociar con Bolivia un acceso soberano al mar”.
Entre uno de estos puntos está la agenda bilateral de 13 puntos entre los cuales estaba incluido el tema marítimo En la XXII Reunión del Mecanismo de Consultas Políticas Bolivia-Chile, celebrada en julio de 2010, se acordó sobre el punto VI de la Agenda bilateral “proponer, así como alcanzar soluciones concretas, factibles y útiles en la próxima y sucesivas reuniones del Mecanismo de Consultas Políticas, que beneficien el entendimiento y la armonía de ambos países”.
La siguiente reunión debía llevarse a cabo en la ciudad de Arica en noviembre de 2010. No obstante, fue suspendida unilateralmente por Chile y no se la volvió a convocar, pese a las reiteradas solicitudes de Bolivia.
“La demanda es para que Chile cumpla sus compromisos, sus ofertas y hasta último, hasta nuestra gestión la presidenta Bachelet, una agenda de 13 puntos donde está el mar, desde el momento que incluye el tema del mar la presidenta Bachelet, ratificada en la primera parte de la gestión del ex presidente de Chile, Sebastián Piñera”, remarcó Morales.
Asimismo lamentó que los alegatos presentados por Chile para buscar que la CIJ se declare incompetente en la demanda marítima, eran más amenazas a América Latina. “Es un amedrentamiento, esa es la política de algún grupo de políticos en Chile”, puntualizó.